sábado, 26 de octubre de 2013

WERTGOÑA

En España se vive una situación de incongruencia. Tenemos al obrero votando a la derecha, que es como a un negro votando al KU KUS KLAN.

Y en todo este escenario de oscurantismo la ministra Mato nos quiere convencer de que no sabe a lo que se dedica su marido... pero como la gente se puede creer eso??

Y en todo este atropello de recortes y privatizaciones a toda velocidad, pero recortes no solo de servicios, sino de derechos, tenemos a un ministro de Educación que parece que lo han puesto como para cortar jugada en un partido de fútbol. El tipo aparece, mete una patada, y desvía la atención hacia cualquier lado.

Como lesbiana no puedo ser de derechas. Solo es perdonable en el caso de las lesbianas con pasta, donde sus intereses económicos se antepongan a otro tipo de intereses.


El tipo en cuestión pues ha sacado una nueva ley de educación, en la que convierte los colegios en empresas y donde beneficia a la educación privada. Bueno...no coments con el tema religión.

Si todo eso no fuese suficiente, es una ley redactada totalmente en masculino, dejando el plano femenino totalmente de lado. Vamos, que ya les dan igual las formas y las maneras.

Lo que si hay que reconocer es que la mayoría quiere este gobierno, porque si están en el poder es por algo. Y eso hay que respetarlo, aunque todas las moscas vayan a la mierda.

Eso si, el tipo este hace muy bien lo de despistar la atención de las cosas preocupantes. Como el caso Barcenas y los sobres de dinero. A ver por donde sale la impresentable de la Cospedal, otra que no sé porque tantas lesbianas adoran... (creo que a veces la ignorancia hace tener concepciones equivocadas de la gente).

Aquí os dejo un video con una canción realizado en las calles de Santiago de Compostela.

POR UNA ENSEÑANZA JUSTA E IGUALITARIA.


http://www.youtube.com/watch?v=XX2y60EZJgo




2 comentarios:

  1. No puedes tener más razón en eso de que la ignorancia hace tener concepciones equivocadas... esto es algo que deberíamos aplicarnos todos, en todo lo que decimos. En cada cosa que escribimos o cada persona de la que hablamos.

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