domingo, 16 de diciembre de 2018

VENENO

Ayer me comentaba un tipo en un bar que si la sexta era de izquierdas que bla bla bla.

Vamos a ver, a la sexta no va Inda, y no va Maroto? Entonces tendríamos que decir para ser mas correctas, que es un medio informativo plural.

Si se analizan los medios de comunicación en España, la derecha domina prácticamente todos los medios de comunicación.

Entonces, es NORMAL que la sociedad tenga una formación política hacia la derecha.

Lo que esta claro es que en este país necesitamos medios de comunicación como un The Guardian, medios de comunicación independientes, que se deban al compromiso de la información y no a la de aquellas "fuerzas oscuras" que están detrás de sus ingresos económicos.

Ayer me pasé por la Universidad. La ultraderecha en este pais maneja muy bien las redes sociales.

El mundo universitario en bloque aupados por las redes sociales tienen ya claro que quieren apoyar a la ultraderecha. Y estos son listos, es un voto a largo plazo, que podrán repetir muchas veces. No como el de los pensionistas que tienen su esperanza de vida más corta.

Parece que no se aprende de los errores de otra gente para aprender. No habíamos dicho ya en la historia mundial, el impacto de las redes sociales en el triunfo de Trump? ( la verdad que el nombre te dan ganas de añadirle un - oso detrás) : Trumposo.

Lo que está claro es como que nos están lllevando al matadero como a ovejitas,  y estamos llendo incluso como cantando de alegría. Eso si, ovejitas muy españolas.

Porque ahora solo son españolas las que son de derechas, las demás ya no lo somos. Nos lo han quitado. En breve solo serán españolas aquellas a las que le gusten los toros.

Recuerdo estudiar en los libros de historia que había militares que defendían bandos de izquierda y bandos de derecha. Ah no, ahora resulta que los cuerpos de seguridad solo son cuerpos de seguridad si son de derechas. No pueden ser de izquierdas, o de centro, o simplemente apolíticos.

Desde luego todas tenemos muchos motivos para estar enfadadas con el sistema. Yo lo estoy. Y mucho. Porque siguen contándome el cuento de Caperucita y tengo que hacer lo que me diga el lobo o la manada.

No nos dejan opciones. Pero como ha circulado por las redes, la hormiga enfadada con la cigarra votó por el VENENO.

Hoy tengo un sueño: que Pedro Sánchez consiga el dialogo con Cataluña. Porque ha hecho las políticas más feministas en este país. Y yo no quiero que se vaya.



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